Requisitos en un libro, según el género

    Creo que, si alguien ha estado leyendo todas las demás entradas, verá que el género literario que leo, prácticamente en exclusiva, es el de la novela. Me encanta, es con el que me siento más cómoda, a la hora de leerlo. Yo no digo que no quiera leer otra clase de géneros, de hecho, es uno de mis objetivos lectores para el 2020 (pinchad para ver cuáles son), pero claro, una va a lo que siente más cómodo, es de sentido común.

    Y eso me hace replantearme, ¿qué necesita cada género, dentro de la novela, para poder considerarse, una buena historia? Bueno, esto es un concepto muy complicado, pero desde mi punto de vista, creo que estos son los ingredientes necesarios para poder ser un buen libro del género. Pondré ejemplos de libros que he leído, por lo que, tal vez, haya mejores, pero eso no lo sé:

TERROR

    A ver, está claro cuál es el objetivo de este género: darte miedo, asustarte. Ahora bien, si no te estás cagando por las patas para arriba, porque a lo mejor eres un témpano de hielo, ¿significaría que no cumple con su objetivo? Ummmm, yo creo que no, por lo que añadiría que, como mínimo, debe angustiarte, dejarte con el cuerpo tenso. Con el Exorcista me pasó; es decir, no me dio miedo, pero me dio mal rollo el demonio dentro de Regan, por lo que sigue siendo una buena historia. De hecho, la semana que viene prepararé una reseña.

ROMANCE

    Aquí, si bien puede tener varios objetivos, hay uno que se debe cumplir a rajatabla: que te enamores de la pareja protagonista, y quieras para ellos un final feliz. Todo lo que le rodea, si el autor lo hace bien, puede ser un complemento que enriquezca la historia, pero si los protas son sosos, o tóxicos, pierde toda la gracia. He leído varios, pero mis queridos Claire y Jamie siempre serán mi pareja número uno, indiscutible.

HISTÓRICA/FICCIÓN HISTÓRICA

    En mi más humilde opinión, el género más complicado de escribir, y el más difícil de encontrar uno realmente bueno. Es decir, ya sea que utilices personajes ficticios, o personajes que existieron en el pasado, si no consigues ambientarlo en un lugar real, deja de tener gracia. Tiene que haber una buena investigación por detrás, antes de siquiera ponerte con la novela en sí. Un ejemplo de los bien hechos es La Catedral del Mar, que se ambienta en una Barcelona que existió. La catedral existe, y hasta algunos de los personajes, de los secundarios, existió.

POLICIACA

    Este género, de toda la lista, es la que menos he leído, pero este año, al contrario que las anteriores, ha cogido un cierto protagonismo, y me parece justo mencionarla. Así que, para que una historia policiaca sea buena, debe haber un caso, un crimen, que te mantenga enganchado, intrigado, y sin saber que ocurre hasta el final del libro. Este último punto es muy importante, o de lo contrario, pierde toda la gracia. Sherlock Holmes es el referente en este género, y el libro de El Estudio en Escarlata me intrigó más de lo que pudiera parecer.

FANTASÍA

    ¿Y cómo no voy a hablar de este género? Es decir, es mi género favorito, mi inspiración, y siempre he tenido claro lo que quiero en esta clase de libros: que lo absurdo sea creíble. O sea, si en un mundo, los animales hablan, las estatuas cobran vida, y las personas tienen cinco ojos, y no me lo cuestiono, sobresaliente a la novela. Y claro, aunque han pasado muchos años, El Señor de los Anillos sigue siendo la primera historia, en la que piensas, cuando hablamos de fantasía.